¿TU COMO LE HACES PARA MANTENER LA MODA?

 

La importancia de la moda como herramienta para mejorar la vida de las personas

 La industria de la moda se ha venido relacionando a lo largo de la última década con el consumo desenfrenado, la contaminación medioambiental y la explotación laboral a todos los niveles

¿Alguna vez te habías planteado en qué sentido podría la moda influir de manera positiva en la sociedad?

El papel de la Moda en los Objetivos de Desarrollo Sostenible

Naciones Unidas desarrolló un conjunto de objetivos globales junto a líderes mundiales, organizaciones internacionales y público en general, para ayudar a combatir el cambio climático. Conocidos como Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), estos 17 Objetivos reconocen que el fin de la pobreza o acabar con el hambre en el mundo, deben ir de la mano con estrategias que promuevan la salud y la educación, reducir las desigualdades y estimulen en crecimiento económico, todo esto mientras se planta cara al cambio climático y se trabaja por preservar los océanos y los bosques.

Entonces, ¿Qué tienen que ver estos Objetivos con una industria como la moda? Si tienes en cuenta que la industria de la moda es una de las que más empleados tiene a nivel mundial, en su mayoría mujeres (algunas estimaciones afirman que cerca de un 80% de la cadena de suministro de la moda mundial está compuesto con mujeres, y en España supera el 50%), tiene sentido que la industria textil esté envuelta no solo en el debate de la sostenibilidad, sino también en el componente social de la misma, ya que la moda es una industria impulsora de creación de empleo.

La Moda aplicada a los ODS Sociales

Objetivo 1: Fin de la pobreza

La industria de la moda debe jugar un papel activo a la hora de mejorar la calidad de vida de las comunidades donde opera, pagando salarios justo e igualitarios a todos sus empleados y asegurándose de que ningún miembro de la cadena de valor esté viviendo por debajo del umbral de la pobreza.

La industria de la moda no solo es capaz de generar millones de puestos de trabajo y de sacar a muchas personas de la pobreza, sino que tiene un gran desafío a combatir, y es asegurarse de que los trabajos ofrecidos son decentes y son remunerados de manera digna a todas las personas implicadas en la cadena de suministro. Acabamos de hacer referencia a la meta 1.1 del ODS 1 “Fin de la pobreza”, a la que también hacía alusión el informe de la  Campaña Ropa Limpia “Salarios Dignos 2019”, y mostraba que más allá de los compromisos presuntamente adquiridos por las empresas, es el propio modelo económico basado en la búsqueda de costes de producción más bajos lo que debe ser revisado y cambiado imponiendo normas vinculantes a las multinacionales con el fin de garantizar los derechos humanos, y en consecuencia, el cumplimiento del ODS 1.

Objetivo 2: Hambre cero

En la producción de materias primas textiles como el algodón, la industria de la moda explota indebidamente terrenos que podrían utilizarse para cultivos. Además de utilizar grandes cantidades de agua que podrían utilizarse tanto para beber como para criar animales en granjas.

En la aplicación de la moda al ODS 2 “Hambre cero” la moda sostenible que reutiliza y recicla material que ya está producido, o mediante la innovación de materiales a partir de residuos, más terrenos podrían utilizarse para la producción de alimentos de las personas dedicadas a la producción de ropa.

Objetivo 5: Igualdad de género

Mientras que la mayoría de gente que trabaja en la industria de la moda son mujeres, esto tiende a ser más común en las posiciones más junior, mientras que los miembro de los órganos de decisión son en su mayoría hombres según The Glass Runway, un estudio del Council of Fashion Designers of America (CFDA), Glamour y McKinsey & Company.

El ODS 5 “Igualdad de género”, y más concretamente el indicador 5.2.1 aplicado a la moda sostenible puede conseguir grandes cosas; las mujeres necesitan seguridad para que se vean capaces de poder ocupar puestos de responsabilidad dentro de la industria de la moda, como dirección creativa y dirección general. El acoso sexual en ciertas áreas de la industria como el modelaje también debe ser un tema importante a tratar.

La moda persigue el objetivo de empoderar a las personas para expresar su identidad a través de la ropa, independientemente de su género y las marcas pueden dar voz para tratar todos estos temas tan controvertidos en los últimos tiempos.

Objetivo 10: Reducción de desigualdades

La crisis mundial del COVID-19 ha dejado al descubierto ciertas desigualdades dentro de la industria de la moda.

La parte más vulnerable de toda la cadena de suministro ha demostrado ser los trabajadores y trabajadoras de las fábricas, con casi la mitad de los trabajadores con grandes dificultades para mantener sus trabajos debido a cancelaciones e impagos por parte de gigantes de la moda rápida de los países que estaban en confinamiento.

El indicador 10.4.2 del ODS 10 “Reducción de desigualdades” trata el efecto redistributivo de la política fiscal. Cada vez son más las empresas de moda sostenible que ofrece transparencia acerca de sus salarios, con límites entre salarios más bajos y más altos para que no sean siempre los más vulnerables quienes sufren la mayor parte de las consecuencias cuando las cosas van mal.

¿CUALES SON LOS ESTILOS DE LA MODA?

 Los tipos de estilos de vestir no sirven para encorsetar, sino para ayudar a las mujeres a tener una referencia al configurar sus estilismos. Cada estilo tiene sus iconos de moda, mujeres que han logrado encontrar una forma de expresión tan característica que, al pensar en un estilo, pensamos en ellas.

Estilos de moda femenina, ¿cuál es el tuyo?

No hace falta que te obsesiones con encontrar tu propio estilo, pues la mayoría de nosotras nos movemos entre varios y vamos decidiendo según al sitio al que vamos, cuánto de cómodas nos apetece estar o incluso qué estado de ánimo tenemos

1. Clásico

Confesamos que es uno de los estilos de moda que más nos gustan, porque es uno de los más armoniosos, elegantes y temporales. Apostar por el clásico siempre es un valor seguro, aunque para encontrar ese punto de sofisticación y glamour también hay que desarrollar criterio. ¡Es cuestión de práctica!

Apuesta por colores neutros como el azul, el café, el burdeos, el beige, el gris y, por supuesto, el binomio blanco/negro. Mejor tejidos planos con algunos relieves acanalados y, para las noches de fiesta, texturas satinadas

2. Romántico

Para que te hagas una idea, el estilo romántico es muy royal. Es el que elegirían las princesas Disney clásicas, pero con cuidado de no ir demasiado recargadas. Y es que las prendas destacan por su alta ornamentación y por los cortes tridimensionales.

Para una noche de fiesta, un vestido con transparencias y pedrería formando geometrías y motivos naturales sería el que escogería una chica “romántica”. El plateado o el dorado serían sus colores predilectos

3. Boho

Entre los diferentes estilos de vestir, los inicios de este se suelen ubicar a principios del año 2000. Aúna lo hippy y lo bohemio, así que es un estilo con mucha personalidad que no resulta fácil clavar. Lo bueno es que no tienes que imitarlo, sino adaptarlo a lo que te guste. ¡Como todos los demás!

Los maxivestidos, las prendas tejidas en crochet o macramé, los sombreros, las prendas con estampados étnicos o los chalecos son algunos de los grandes aliados de este estilo.

4. Deportivo

Hace ya unos años que conocimos el concepto de athleisure , que promueve el uso de prendas deportivas en el día a día sin renunciar al glamour. Se puede ir chic con outfits tradicionalmente reservados al ejercicio físico, lo que tiene su dificultad. Quienes lo consiguen trasladan mucha personalidad.

Que no te falten las zapatillas deportivas, las sudaderas, las camisetas o los pantalones de chándal, que podrás combinar con minifaldas y vaqueros. La gran ventaja es la de la comodidad.

5. Fashion

También se le llama trendy. No es un estilo en sí mismo, sino que define una práctica: la de seguir siempre las tendencias en moda. Quienes se adhieren a él se ponen lo que se lleva, pero no se trata de asumir cualquier corriente sin criterio, sino de adaptarla a un estilo personal.

Para seguir este estilo, ponte lo que se lleve. Te obligará a hacerte con prendas nuevas temporada tras temporada, pero como la moda es cíclica, siempre habrá que podrás rescatar.

6. Hipster

Es el estilo de las mujeres inconformistas y que rehúsan encorsetarse. Por eso mezclan el grunge, el boho y el hippie para configurar looks originales con algún toque gótico. Con criterio, eso sí, para no parecer un collage.

Una camiseta oversize, unos vaqueros rotos y unas botas planas te pueden servir de inicio para explorar este estilo. Puedes coronar con unas gafas de sol molonas, con sombreros de lana en el invierno y lo que se te ocurra para dar el toque

7. Grunge

El grunge es un estilo parecido al anterior, con la diferencia de que es más rígido. Nos referimos a que, si bien el hipster es más ecléctico y admite más mezcla, el grunge se ciñe a lo rebelde y desenfadado.

Si estás perdida, imagínate llevando pantalones vaqueros negros rotos, una camiseta de tu banda favorita, unas botas militares y una sobrecamisa de cuadros. Eso es grunge

8. Minimalista

El minimalismo arrasa entre los estilos decorativos para el hogar y también en la moda. Se basa en la máxima de que menos es más, luego se ubica en una línea opuesta a la del estilo romántico, por ejemplo. Es más parecido al clásico, con el que comparte ventajas como la atemporalidad.

Los abrigos de corte masculino, las prendas básicas y los colores neutrales son los reyes de este estilo. Pero no te dejes engañar, porque minimalista no quiere decir simple y aburrido. Es más, puede resultar difícil componer un look chic, porque con frecuencia se peca de sosedad

9. Preppy

Quizás el término se te asemeje a repipi, pero no. O sí, depende de cómo lo veas. Toma como referencia la forma de vestir de las estudiantes estadounidenses de clase alta, así que es uno de los estilos de moda femenina más juveniles. Y más posh.

Las faldas de tablas, las camisas blancas, los polos, los jerséis de pico o las diademas forman parte del armario de las chicas preppy. Suelen arriesgarse y combinar, logrando componer looks muy athleisure con su propio estilo.

10. Urban-chic

Se le llama también streetwear. Es un estilo libre, incluso diríamos que funciona a modo de cajón de sastre. Sigue las tendencias, pero adaptándolas a las preferencias para ganar en comodidad y seguridad en una misma.

Vaqueros, camisetas, chaquetas y blazers se consideran los básicos de este estilo. Se apuesta con frecuencia por la combinación de volúmenes, por ejemplo, oversize por arriba y ceñido por debajo

EL DISEÑO DE INIDUMENTARIA

 La moda suele estar asociada a lo que tiene que ver con el diseño de ropa y la indumentaria. Es frecuente referirse a dicho sector como la industria de la moda, aún cuando son pocos los diseñadores capaces de imponer un estilo.

Pese a que la adscripción a una moda es voluntaria, las personas que prefieren no seguir dichos mandatos quedan, en cierta forma, apartados de la sociedad. Usar algo fuera de moda está mal visto y puede ser objeto de críticas o burlas